A continuación encontrará una lista de diferentes tipos de hemorragias, cómo identificarlas y qué hacer en cada caso. Si tuviera dudas o preguntas comuníquese siempre con su proveedor de atención médica y con su centro de tratamiento de hemofilia (HTC por su sigla en inglés). Si se tratara de una hemorragia grave acuda a la sala de emergencias más cercana, o llame al 911 si se encontrara en Estados Unidos. Para obtener más información sobre señales y síntomas comunes, frecuentemente relacionados con trastornos hemorrágicos haga clic aquí.

Los siguientes son algunos recordatorios importantes al hacer frente a cualquier tipo de hemorragia

Prevenga la hemorragia siempre que sea posible y, si llegara a ocurrir, administre tratamiento inmediatamente. La frecuencia de los incidentes hemorrágicos generalmente depende de la gravedad del trastorno hemorrágico. Algunos pueden presentarse espontáneamente, mientras que otros podrían ocurrir solamente durante cirugías u otros procedimientos médicos. Cuando se presenta una hemorragia es importante reconocer las señales y los síntomas lo más pronto posible para poder iniciar el tratamiento adecuado.

Algunas hemorragias son menos graves que otras. Las hemorragias comunes, como moretones y hemorragias en boca y nariz, generalmente no requieren atención médica de emergencia. Si una persona con un trastorno hemorrágico tuviera una hemorragia y no estuviera en un programa de terapia en el hogar mediante el cual usted administra el tratamiento para la hemorragia en casa, comuníquese de inmediato con su proveedor de atención médica o con su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) para determinar el mejor plan de atención. Si la hemorragia no se detuviera o usted estuviera preocupado(a), llame siempre a su proveedor de atención médica o a su HTC.

Algunos tipos de hemorragias constituyen situaciones de emergencia. Hay cinco tipos principales de episodios hemorrágicos graves que pueden poner en peligro la vida, las extremidades o la función de los órganos. Estos son hemorragias intracraneales (en la cabeza), hemorragias oculares (en los ojos), hemorragias en cuello o garganta, hemorragias abdominales, y hemorragias en los riñones o en la vejiga. Todas estas hemorragias requieren que llame a su proveedor de atención médica, intervención inmediata, y llamar al 911 o acudir a la sala de emergencias local.

Diferentes tipos de hemorragias

Hemorragias en la cabeza

Las hemorragias en el cerebro o alrededor de este pueden ser resultado de una lesión u ocurrir por una razón desconocida. Debido a que no es posible ver una hemorragia en el cerebro, es importante estar consciente de las siguientes señales.

Señales

  • Dolor de cabeza prolongado (un niño pequeño podría agarrarse la cabeza indicando que tiene dolor).
  • Confusión, aletargamiento y/o dificultad para hablar (arrastrar las palabras).
  • Visión doble (un niño pequeño podría decir que las cosas se ven “raras”).
  • Aversión (rechazo) a la luz brillante.
  • Pupilas dilatadas (agrandadas) o diferente tamaño en cada pupila.
  • Vómito repentino o explosivo (no necesariamente debido a un problema estomacal).
  • Mareo
  • Tambaleo (dificultad para caminar, debilidad repentina o problemas de equilibrio).
  • Adormecimiento
  • Pérdida del conocimiento (podría ser difícil despertar a un niño que está durmiendo).
  • Cuello o espalda rígidos
  • Convulsiones
  • Pérdida del apetito
  • Irritabilidad

Medidas que debe tomar

Las hemorragias en la cabeza son graves.

Comuníquese inmediatamente con su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) o llame al 911.

Hemorragias en los ojos

Las hemorragias al interior de los ojos podrían ser causadas por una lesión u ocurrir por una razón desconocida. Entre las señales de una hemorragia en el ojo se cuentan cambios en la visión que podrían ser difíciles de detectar en bebés o niños pequeños que no pueden decir que algo anda mal. Un niño que puede hablar podría simplemente decir que los objetos se ven “raros”.

Señales

  • Dolor e inflamación en el ojo y a su alrededor.
  • Enrojecimiento del blanco del ojo (llamado conjuntiva).
  • Visión doble o borrosa.
  • Cambios en la visión.

Medidas que debe tomar

Las hemorragias en los ojos son graves.

Comuníquese inmediatamente con su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) o llame al 911. Entre tanto, colocar una compresa de hielo sobre el ojo para disminuir la hemorragia y reducir la inflamación.

Hemorragias en la nariz

Una hemorragia nasal ocurre cuando se dañan los pequeños vasos sanguíneos al interior de las cavidades nasales. Esto puede ocurrir debido a un golpe fuerte en la nariz, por hurgarse la nariz, por estornudar, por sonarse la nariz, e incluso por respirar aire muy seco.

Señales

  • Hemorragia en los orificios nasales, particularmente durante mucho tiempo.
  • Vómito (causado por tragar mucha sangre; el vómito podría ser oscuro o parecer café molido).
  • Heces o deposiciones oscuras (por haber tragado mucha sangre).
  • Mal sabor en la parte trasera de la boca (un niño pequeño podría decir que la comida sabe “rara” o podría no querer comer).

Medidas que debe tomar

Hable con su equipo médico del HTC sobre tratamientos para hemorragias nasales, de modo que sepa qué hacer si llegara a presentarse una hemorragia de este tipo.

Los siguientes son algunos tratamientos para una hemorragia nasal:

  • Inclinar la cabeza hacia adelante y con un paño frío aplicar presión sobre el puente de la nariz.
  • De ser posible, sonar la nariz suavemente para expulsar mucosidad y coágulos sueltos.

Dependiendo de la gravedad de la hemorragia podría necesitar tratamiento adicional específico para su trastorno hemorrágico. Si tuviera preguntas sobre el tratamiento comuníquese siempre con su HTC.

En caso de un episodio hemorrágico grave llame a su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) y acuda a la sala de emergencias o llame al 911.

Hemorragias en la boca

Las hemorragias en encías, lengua, labios o al interior de las mejillas pueden ser resultado de una mordida accidental, de la erupción o caída de un diente, de una caída o de meterse objetos a la boca.

Señales

Sangre en la boca y alrededores (la sangre podría ser menos visible si se traga).

Algunas veces podría subestimarse la pérdida de sangre, particularmente si una persona se la traga. Podría ser difícil determinar la cantidad, especialmente cuando se trata de niños. Observe para determinar si el niño tiene náuseas, vómito o pierde el apetito. En los casos más graves, los niños podrían vomitar sangre y tener heces o deposiciones oscuras.

Medidas que debe tomar

Hable con su equipo médico del HTC sobre tratamientos para hemorragias bucales, de modo que sepa qué hacer si llegara a presentarse una hemorragia de este tipo.

Los siguientes son algunos tratamientos para una hemorragia nasal:

  • Con un paño o gaza limpios aplicar presión en la zona de la hemorragia, si fuera accesible.
  • Usar alimentos fríos, como paletas heladas, para reducir el flujo de sangre al sitio de la hemorragia.
  • Ofrecer alimentos suaves, como helado, que ayudan a proteger coágulos nuevos.
  • Evitar que los niños succionen cualquier cosa dura, como anillos para la dentición.
  • Evitar que los niños usen pajillas o chupetes ya que podrían desalojar el coágulo o evitar que se forme.
  • Durante el periodo de sanación continuar limpiando dientes y encías con un hisopo de algodón.
  • La aplicación de bolsitas de té negro puede ayudar a detener la hemorragia después de procedimientos dentales (los taninos del té hacen que disminuya la hemorragia cuando las bolsitas de té se aplican sobre la superficie que sangra. ¡Muchos campamentos de hemofilia tienen bolsitas de té en sus kits de primeros auxilios!).

Dependiendo de la gravedad de la hemorragia podría necesitar tratamiento adicional específico para su trastorno hemorrágico. Si tuviera preguntas sobre el tratamiento comuníquese siempre con su HTC.

En caso de un episodio hemorrágico grave llame a su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) y acuda a la sala de emergencias o llame al 911.

Hemorragias en la garganta

Una hemorragia en la garganta es un tipo de hemorragia bucal más grave. La gravedad depende de la cantidad de sangre que se pierda y de si provoca inflamación que pudiera dificultar la respiración.

Señales

  • Inflamación o descoloración en el cuello.
  • Dificultad para tragar o respirar.
  • Asfixia/ahogo
  • Escupir o toser sangre.
  • Cambio en el tono de la voz.

Medidas que debe tomar

Las hemorragias en la garganta son graves.

Comuníquese inmediatamente con su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) o llame al 911.

Hemorragias gastrointestinales

Las hemorragias gastrointestinales (GI) ocurren cuando hay sangrado en el estómago o en los intestinos. Es importante prestar atención a señales específicas que podrían indicar una hemorragia GI:

Señales

  • debilidad
  • Palidez (también llamada palor)
  • Deposiciones o heces negras o con sangre, parecidas al alquitrán.
  • Vomitar o toser sangre. Algunas veces el vómito podría ser un líquido oscuro o parecer café molido.
  • Dolor estomacal o abdominal (un niño con una hemorragia GI podría decir que tiene dolor de estómago o podría indicar de manera no verbal que le duele el estómago).
  • Abdomen distendido y firme

Medidas que debe tomar

Las hemorragias GI son graves.

Comuníquese inmediatamente con su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) o llame al 911.

Hemorragias en el tracto urinario

La sangre en la orina puede provenir de cualquiera de varios lugares a lo largo del tracto urinario, entre ellos uréteres, vejiga y uretra. Las señales de sangre en la orina pueden ser evidentes o sutiles. Es probable que los niños pequeños no puedan avisarle que tienen estas señales.

Señales

  • Orina rosada (en los pañales o en el excusado). Esto podría ser una señal del inicio de una hemorragia en el tracto urinario.
  • Orina de color rojo vivo o marrón (en los pañales o en el excusado). Esto podría ser una señal de una hemorragia en evolución, más grave.
  • Dolor en la espalda baja (los niños podrían mostrarse incómodos en una posición particular en la cuna, la silla alta o la silla del automóvil).
  • Orinar con frecuencia.
  • Dolor ar orinar (un niño que ya puede ir al baño podría hacer un gesto de dolor al orinar o negarse a ir al baño).

Medidas que debe tomar

Si usted o su hijo(a) tuvieran una hemorragia en el tracto urinario llame a su HTC para obtener asesoría. El tratamiento dependerá del lugar donde se origine la hemorragia. En caso de un episodio hemorrágico grave llame a su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) y acuda a la sala de emergencias o llame al 911.

Hemorragias en tejidos blandos

Las hemorragias en tejidos blandos ocurren bajo la piel, cerca de la superficie, y se conocen comúnmente como moretones. La hemorragia en tejidos blandos genera un abultamiento de la zona, llamado hematoma. Esta es una hemorragia muy común, particularmente cuando los niños pequeños se vuelven más activos. Los moretones en las nalgas de los bebés son comunes cuando están aprendiendo a caminar, incluso con la protección del pañal. Los moretones podrían desaparecer lentamente.

Señales

  • Oscurecimiento de la piel, probablemente con un centro abultado.
  • Malestar al sentarse o caminar.

Medidas que debe tomar

Hable con su equipo médico del HTC sobre tratamientos en casa para hemorragias en tejidos blandos, de modo que sepa qué hacer si llegara a presentarse una hemorragia de este tipo.

El siguiente es un tratamiento sencillo para una hemorragia en tejidos blandos: P.R.I.C.E. Spanish (TERAPIA P.R.I.C.E)

Dependiendo de la gravedad de la hemorragia podría necesitar tratamiento adicional específico para su trastorno hemorrágico. Si tuviera preguntas sobre el tratamiento comuníquese siempre con su HTC. En caso de un episodio hemorrágico grave llame a su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) y acuda a la sala de emergencias o llame al 911.

Hemorragias en articulaciones

Las hemorragias articulares (hemorragias en cualquier articulación) ocurren cuando la sangre se filtra en el espacio entre dos huesos. Las articulaciones de codo, rodilla y tobillo son lugares frecuentes de hemorragias articulares, pero pueden presentarse hemorragias en cualquier otra articulación, entre ellas muñecas y dedos de manos y pies. Los niños pequeños podrían no saber que tienen una hemorragia articular o no poder comunicárselo a usted. Algunas veces puede ser difícil determinar si hay una hemorragia articular. Es importante prestar atención a las siguientes señales y enseñarles a los niños a distinguirlas.

Señales

  • Sensación de burbujeo o cosquilleo en la articulación.
  • Sensación de tirantez en la articulación.
  • Dolor en la articulación (en niños pequeños, llorar sin motivo aparente podría ser una señal).
  • La piel sobre la zona afectada se siente caliente al tocarla (los niños podrían decir que su articulación “se siente caliente por adentro”).
  • Inflamación de la articulación.
  • Menor capacidad para mover la articulación (los niños podrían cojear, tener problemas para caminar o usar sus brazos o manos).
  • Un niño podría no querer usar un brazo o una pierna (podrían no alcanzar un objeto usando la mano con la que habitualmente lo hacen. Es probable que no puedan realizar actividades como patear una pelota o montar un triciclo).

Medidas que debe tomar

Hable con su equipo médico del HTC sobre tratamientos en casa para hemorragias articulares, de modo que sepa qué hacer si llegara a presentarse una hemorragia de este tipo.

El siguiente es un tratamiento sencillo para una hemorragia articular: P.R.I.C.E. Spanish (TERAPIA P.R.I.C.E)

Dependiendo de la gravedad de la hemorragia podría necesitar tratamiento adicional específico para su trastorno hemorrágico. Si tuviera preguntas sobre el tratamiento comuníquese siempre con su HTC. En caso de un episodio hemorrágico grave llame a su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) y acuda a la sala de emergencias o llame al 911.

Hemorragias en músculos

Las hemorragias musculares (hemorragias en cualquier músculo) ocurren con mayor frecuencia en brazos y piernas, pero cualquier músculo puede verse afectado. Las hemorragias en músculos mayores, como los de muslos y pelvis, pueden ser particularmente graves. Esto se debe a la pérdida de sangre y a la posibilidad de presión sobre nervios y vasos sanguíneos de la zona.

Señales

  • Dolor o malestar en los músculos o a su alrededor.
  • Mal humor (en niños)
  • Cojear o no querer usar la pierna o el brazo afectados (los niños podrían negarse a gatear o caminar).
  • Disminución de movimientos (los niños podrían realizar actividades físicas más lentamente).
  • Inflamación o tirantez (una extremidad podría estar más larga que la otra).
  • La piel sobre la zona afectada se siente caliente.
  • La piel parece estirada, brillante o azul.
  • Las venas parecen más grandes que lo normal.
  • Entumecimiento u hormigueo (los niños podrían decir que esa parte de su cuerpo “está dormida” o tiene “cosquillas”).

Medidas que debe tomar

Hable con su equipo médico del HTC sobre tratamientos en casa para hemorragias musculares, de modo que sepa qué hacer si llegara a presentarse una hemorragia de este tipo.

El siguiente es un tratamiento sencillo para una hemorragia muscular: P.R.I.C.E. Spanish (TERAPIA P.R.I.C.E)

Dependiendo de la gravedad de la hemorragia podría necesitar tratamiento adicional específico para su trastorno hemorrágico. Si tuviera preguntas sobre el tratamiento comuníquese siempre con su HTC.

Las hemorragias musculares, particularmente en muslos o pelvis, podrían ser graves.

En caso de un episodio hemorrágico grave llame a su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) y acuda a la sala de emergencias o llame al 911.

Cortadas o laceraciones profundas

Una cortada o laceración profunda es una lesión que provoca una ruptura o apertura en la piel. Las cortadas profundas son fáciles de observar. Podrían encontrarse cerca de la superficie de la piel o ser profundas y tener bordes lisos o irregulares.

Medidas que debe tomar

Comprimir y colocar una compresa de hielo en la zona (no directamente sobre la piel) para disminuir la hemorragia y la inflamación.

Podría necesitarse tratamiento al momento de colocar o retirar puntos de sutura o vendajes sobre la herida.

Las cortadas o laceraciones profundas son graves.

Comuníquese inmediatamente con su centro de tratamiento de hemofilia (HTC) o llame al 911.