Para preadolescentes y adolescentes, las relaciones con sus amigos y determinar en dónde encajan socialmente son cosas muy importantes. Son comunes las preguntas y las preocupaciones sobre autoestima, valor propio y aceptación social. Pero, ¿qué ocurre cuando se agrega un trastorno hemorrágico a esta mezcla?
Esta sección abordará los temas de citas, relaciones sexuales e interacciones sociales durante los años de la preadolescencia y la adolescencia. También encontrará consejos sobre cómo hablar de sexualidad con su hijo(a).
En qué piensan adolescentes y preadolescentes
Hablar con su adolescente o preadolescente
Consejos para sostener “la conversación”
En qué piensan adolescentes y preadolescentes
Los viajes de campo y las actividades extracurriculares escolares ofrecen muchos excelentes beneficios a niños y adolescentes. Preadolescentes y adolescentes empiezan a descubrir quiénes son y dónde encajan. Esto puede resultar interesante y difícil. En el caso de niños con trastornos hemorrágicos, su padecimiento podría agregar unas cuantas preocupaciones más. Podrían preocuparles las citas románticas y si será necesario contarles a otras personas sobre su trastorno. Podrían desear compartir más sobre sus experiencias y corregir cualquier información errónea, o podrían elegir no hablar acerca de su trastorno sanguíneo o hemorrágico. Alcanzar la madurez sexual podría traer consigo inquietudes sobre la posibilidad de que la actividad sexual o la masturbación pudiera causar una hemorragia. Las adolescentes que menstrúan y tienen un trastorno hemorrágico podrían desarrollar temores en torno a cómo manejar sus periodos abundantes. La comunicación abierta y la información precisa de padres, personas cuidadoras y adultos en quienes confían puede ayudar a preadolescentes y adolescentes a tomar decisiones adecuadas y a sentirse a gusto con sus cuerpos.
Si desea obtener más información sobre preguntas comunes que adolescentes y preadolescentes podrían tener sobre citas y relaciones sexuales vea este video.
Hablar con su adolescente o preadolescente
Los jóvenes necesitan información y orientación de padres, personas cuidadoras o adultos en quienes confían para ayudar a instruirlos. Contar con la información correcta ayuda a adolescentes y preadolescentes a tomar decisiones sanas y adecuadas respecto a su salud sexual. La educación sexual a través de internet, de redes sociales o de otros compañeros podría ser inexacta, inadecuada y confusa. Si bien hablar sobre sexualidad puede resultar incómodo tanto para padres y personas cuidadoras como para adolescentes y preadolescentes, es importante hacerlo. Aprender sobre sexualidad forma parte normal del desarrollo. Responder a las preguntas de su hijo(a) de manera honesta y adecuada a su edad es la mejor estrategia. Existen recursos para ayudarle a hablar con sus hijos acerca de la sexualidad, de maneras adecuadas a su edad. La página internet de la Academia Estadounidense de Pediatría, healthychildren.org, tiene artículos sobre cómo hablar con niños en edad preescolar y escolar, y con adolescentes.
Adolescentes y preadolescentes tienen una curiosidad natural por la sexualidad. Es importante orientar esa curiosidad de manera que obtengan información precisa. Al hablar sobre las responsabilidades que acarrea la actividad sexual también menciónele a su adolescente o preadolescente que es normal tener curiosidad acerca de la sexualidad. Puede hablar sobre las posibles consecuencias de la actividad sexual, entre ellas embarazo e infecciones transmitidas sexualmente. Cuando hable sobre sexualidad con su adolescente o preadolescente hable sobre las expresiones positivas de los sentimientos sexuales y la importancia de sentirse dueño(a) de su propio cuerpo.
Los siguientes son algunos de los temas que podría abordar con su adolescente o preadolescente:
- Pubertad
- Menstruación
- Masturbación
- Imagen corporal
- Género y orientación sexual
- Aceptación de sus compañeros(as)
- Consentimiento
- Relaciones sanas, respetuosas
- Mensajes de texto con contenido sexual
- Pornografía
- Anticonceptivos
- Embarazo
- Infecciones transmitidas sexualmente
- ablar con un proveedor de atención médica sobre temas de sexualidad
- La manera en la que su trastorno hemorrágico podría afectar las relaciones y la sexualidad
Si desea obtener más información sobre relaciones consulte la sección Relaciones y divulgación.
Consejos para sostener “la conversación”
Antes de hablar con su adolescente o preadolescente explore sus propios sentimientos acerca de la sexualidad, incluso cualquier probable sentimiento de incomodidad, bochorno o vergüenza que pudiera tener, ya que estos podrían afectar la manera en la que sostiene estas importantes conversaciones con su hijo(a). Los niños recurren a sus padres, a personas cuidadoras o a adultos en quienes confían para conocer su perspectiva sobre la sexualidad y el comportamiento sexual. Es importante estar consciente de sus propios sentimientos y juicios en torno a estos temas. También es útil reflexionar sobre sus creencias y valores en torno a la sexualidad y lo que le gustaría transmitir, si fuera el caso.
El aprendizaje sobre la sexualidad generalmente no ocurre durante una sola conversación. Es un proceso de desarrollo durante el cual adolescentes y preadolescentes aprenden lo que necesitan saber a lo largo de un periodo de tiempo. Las preguntas pueden responderse conforme surjan, de modo que la curiosidad natural de los niños se satisfaga a medida que maduran.
Consejos para hablar con su adolescente o preadolescente sobre la sexualidad:
- Anime a su adolescente/preadolescente a hablar con usted y a hacerle preguntas. Dígale que siempre puede hablar con el equipo del centro de tratamiento de hemofilia (HTC por su sigla en inglés). Infórmele que sus conversaciones con un proveedor de atención médica o con el equipo del HTC pueden ser confidenciales.
- Trate de determinar el nivel de conocimientos de su adolescente o preadolescente de modo que pueda usar palabras que ellos(as) puedan comprender.
- Ayude a su adolescente o preadolescente a entender su trastorno hemorrágico en relación con su sexualidad. Ayúdele a entender los efectos que la pubertad puede tener en su cuerpo.
- Permanezca en calma y absténgase de hacer juicios cuando hable con su adolescente o preadolescente.
- Evite usar palabras indirectas o de jerga para referirse a la sexualidad y las partes corporales.
- Mantenga su sentido del humor. No tema hablar de su propia incomodidad.
- Comparta sus valores y preocupaciones.
- Hable sobre la importancia de responsabilizarse por las elecciones y decisiones propias.
- Se puede planear una conversación sobre sexualidad, pero no dude en aprovechar momentos didácticos que surgen en la vida cotidiana. Estos podrían ser un anuncio en la tele, la escena de una película, o una pregunta que hagan y que desencadene la conversación.
- Encuentre libros adecuados a la edad sobre sexualidad y cambios en el desarrollo durante la adolescencia, que su adolescente o preadolescente pueda leer a fin de ayudar a iniciar la conversación.
- Para hablar con su adolescente o preadolescente sobre sexualidad, intimidad y relaciones, su HTC también puede ser un excelente recurso. El personal de trabajo social o de enfermería podrían contar con información adicional sobre sexualidad para usted y su adolescente o preadolescente.
Si desea obtener más información sobre pubertad visite la sección Pubertad.
Si desea obtener más información sobre reproducción visite la sección Temas reproductivos.