A medida que los niños crecen hay mayores posibilidades de que puedan enfrentarse al alcohol y las drogas. Hablar con niños y adolescentes desde una edad temprana es importante a fin de incrementar la conciencia sobre los riesgos y la presión de amigos y compañeros. Esta sección del Siguiente paso se enfoca en Los riesgos de las drogas y el alcohol para personas con un trastorno hemorrágico y en cómo hablar con su hijo(a) sobre las drogas y el alcohol.

Los riesgos del consumo de drogas y alcohol para las personas con un trastorno hemorrágico

Cómo hablar con su hijo(a) sobre las drogas y el alcohol

Los riesgos del consumo de drogas y alcohol para las personas con un trastorno hemorrágico

Las distintas drogas tienen efectos diferentes en el organismo. Muchas pueden causar problemas de salud importantes, lesiones y accidentes, y pueden provocar dependencia y adicción, incluso a una edad temprana. Padecer un trastorno hemorrágico o sanguíneo añade riesgos adicionales.

Mayor riesgo de episodios hemorrágicos

El alcohol y muchas drogas pueden disminuir el juicio, la coordinación y el tiempo de reacción. Esto puede provocar lesiones por conductas de riesgo o pérdida de equilibrio. Aunque algunos episodios hemorrágicos resultantes pueden ser leves, otros, como una hemorragia cerebral, pueden convertirse rápidamente en muy peligrosos.

La autoinfusión se hace más difícil

El alcohol y algunas drogas actúan como diuréticos, lo que significa que hacen que el cuerpo pierda agua. Esto puede provocar deshidratación. Es mucho más difícil encontrar y acceder a una vena si el cuerpo está deshidratado. Esto puede impedir la infusión de medicamentos muy necesarios para los trastornos hemorrágicos.

Deterioro de la coagulación de la sangre

El alcohol y algunas otras drogas pueden limitar la coagulación de la sangre. Su trastorno hemorrágico ya provoca que la sangre no coagule correctamente. Esto puede intensificarse con el consumo de ciertos fármacos y alcohol, lo que puede provocar episodios hemorrágicos importantes, peligrosos y a menudo difíciles de controlar.

Interacciones entre medicamentos

Las drogas y el alcohol pueden interactuar con otros medicamentos. Estos pueden incluir su medicación para el trastorno hemorrágico u otros medicamentos recetados que pueda estar tomando. La interacción puede hacer que el medicamento deje de funcionar correctamente o tener efectos negativos en su organismo.

Cómo hablar con su hijo sobre las drogas y el alcohol

Hablar con su hijo sobre las drogas y el alcohol es importante. Los niños y adolescentes están más expuestos de lo que usted cree a través de las redes sociales, sus compañeros de colegio o su comunidad en general. La mejor medida preventiva para mantenerlos a salvo es hablar constantemente con su hijo sobre los riesgos del consumo de drogas y alcohol. Estas conversaciones deben comenzar a una edad temprana. Aunque piense que estos temas son demasiado espantosos o que tendrá tiempo de sobra cuando su hijo crezca, las estadísticas demuestran que muchos empiezan a experimentar con las drogas y el alcohol durante la preadolescencia. Por lo tanto, nunca es demasiado pronto para iniciar la conversación.

Pero, ¿cómo puede iniciar una conversación con su hijo sobre este tema? Aquí tienes algunos consejos y trucos que te ayudarán:

Hable a menudo

Hablar sobre el consumo de drogas y alcohol no es una gran conversación de una sola vez. Serán más beneficiosas muchas pequeñas conversaciones que vayan evolucionando a medida que su hijo crezca. Le permitirán abordar las situaciones en el momento y le proporcionarán orientación continua.

Comparta información objetiva

Hay mucha información errónea sobre el consumo de drogas y alcohol entre los jóvenes. Por ejemplo, la gente puede pensar que las pastillas con receta son seguras y no causan adicción. Es importante compartir con su hijo información objetivamente correcta. Esto ayudará a su hijo a tomar las decisiones correctas. La Administración de Control de Drogas (DEA) y el Instituto Nacional de Abuso de Drogas (NIDA) proporcionan información útil sobre muchos fármacos que se utilizan actualmente.

Enseñe a su hijo sobre el impacto en los síntomas de los trastornos hemorrágicos

Los síntomas del trastorno hemorrágico de su hijo pueden verse afectados por ciertas drogas y el alcohol. Será importante que su hijo comprenda las posibles consecuencias negativas del consumo de drogas y alcohol.

Mantenga siempre la calma y no emita juicios de valor

Al hablar de drogas y alcohol, debe crear un entorno en el que su hijo se sienta seguro para compartir sus sentimientos. Apóyele siempre y responda a sus preguntas con sinceridad.

Comparta sus valores, preocupaciones y límites

Aunque no siempre resulte obvio, a los niños les importan los pensamientos y opiniones de sus padres. Los valores, preocupaciones y límites que comparta con su hijo influirán en las decisiones que tome. No compartir sus preocupaciones sobre el consumo de drogas y alcohol puede hacer que su hijo crea que no hay riesgos o que no son para tanto.

Utilice situaciones de la vida real para iniciar la conversación

A menudo puede ser útil iniciar una conversación a partir de una situación de la vida real. Por ejemplo, puede basarse en la escena de una película en la que un actor fuma, bebe o consume otras sustancias. También puede desarrollar una conversación si su hijo menciona situaciones con sus compañeros. Puede empezar haciéndole una pregunta, como "El personaje de la película está bebiendo mucho alcohol, ¿qué opinas de eso?" o "Te he oído decir que el hermano mayor de Ella estaba vapeando. ¿Qué opinas al respecto? Mantén una conversación ligera, pero informativa.

Practica los juegos de rol

Es muy probable que su hijo se vea expuesto a la presión de grupo en algún momento de su vida. A medida que crecen, las opiniones de sus compañeros tienden a ser más importantes. Practicar cómo reaccionar en determinadas situaciones, qué decir y qué hacer les proporcionará habilidades para tomar las decisiones correctas. Por ejemplo, puedes practicar qué decir si un compañero les ofrece medicamentos recetados para concentrarse en la escuela. Además, hazles saber que siempre pueden utilizarte como excusa para salir de una situación incómoda. Por ejemplo, pueden decir: "Mi madre se enfadará mucho y siempre sabe cuándo oculto algo".

Intenta escuchar más que hablar

Permitir que tu hijo haga preguntas, comparta sus experiencias y hable de sus sentimientos genera confianza y relaciones sólidas. Escuchando aprenderás mucho más sobre los conocimientos, opiniones y pensamientos de tu hijo. Esto le permitirá intervenir, cuando sea necesario, pero también mejorar la comunicación.

Recursos

A continuación se presentan recursos sobre drogas y alcohol para padres, niños y adolescentes.